viernes, 17 de diciembre de 2010

El sustanciero

Hace ya un tiempo mi hermana me instaba a que hablara de este personaje. Aunque parezca increible lo que voy a contar es cierto, aún así he buscado en google por si había alguien más que tuviera conociemiento del tema, y hay mas de uno que ha oido hablar de él.

A mi familia la historia del sustanciero llega a través de mi tío Babo. Én realidad se llamaba Eduardo y era el hermano de mi abuela.
Nos explicaba que cuando él era pequeño había un señor que se paseaba con un saco al hombro en el que guardaba un hueso de jamón. Iba pregonando : "El sustanciero, el sustanciero!!". Había siempre alguna señora que le llamaba, él entraba en su casa, desefundaba el jamón y lo metía tres o cuatro veces en el puchero que se estaba cociendo. Se suponía que eso dejaría el sabor del jamón en el caldo. Por este servicio aquella señora pagaba lo que el sustanciero le había dicho. Y así el hombre se ganaba la vida.
Me pregunto si realmente el jamón dejaba el sabor en el caldo. Y me pregunto un poco más y me digo: ¿cuantos usos le daba al jamón?. Otra más: ¿de donde sacaría ese hombre el hueso del jamón en esos tiempos?. La última: ¿qué lleva a un hombre a tener la capacidad para buscar esta manera de ganarse la vida?.
El hambre desarrollaba la imaginación, está visto y comprobado.

2 comentarios:

  1. Estando trabajando en Holanda por el ano 1962, tenia un buen amigo extremeno que me solia contar la historia del sustanciero,que verdaderamente coincide con la que aqui se publica.

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  2. Perdon, no era el jamon sino el hueso del jamon, que a veces de tanto usarlo ya no le quedaba ni sustancia.

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